El pasado fin de semana, durante el festejo de la «Navidad para todos», se realizó un sencillo acto por el 30º aniversario del “Hermanamiento de El Trébol con San Pedro de Brasil”.
Fue en la esquina de Rosario y Seguí, donde está el monumento que conmemora aquella acción, allá por 1989, y que hoy por hoy, se renovó con arte y la incorporación de la escultura realizada por el brasileño Luis Alessio Rubin, en la Fiesta de Arte 2018.
En la misma, estuvieron presentes el Intendente Fernando Almada, los secretarios Gerardo Tessore (Hacienda e Inversión Pública) y Juan Carlos Almada (Servicios Públicos), los directores Carlos Lépore (Desarrollo Comunitario) y Jorge Meynet (Cultura y Relaciones Institucionales) y la edil Jesica Ledesma.
También, el presidente del Club Trebolense y la Sra. Norma Biendicho, como una de las iniciadoras de esta hermandad, cuando las disciplinas del club comenzaban a pisar suelo extranjero llevando a cuesta la bandera de El Trébol.
Meynet, quien llevó adelante la ceremonia, recordó aquellos años, décadas atrás, cuando desde el Patín y el Voley de Trebolense viajaban al exterior y recibían en sus instalaciones a distintas delegaciones, en lo que fue el inicio del Torneo de Voley “Carolina Costagrande”.
Carlos Lépore, como ex presidente del “Celeste” y Maximiliano Ferrero, actual autoridad, dejaron sus palabras y remarcaron al importancia del club, no sólo en lo deportivo, sino también con su aporte en lo social, en la comunidad y en la historia de la ciudad.
Seguidamente, Fernando Almada dejó sus sentires: “Hay determinados símbolos que son importantes. La frase que quedó plasmada en este hermanamiento, que habla de la amistad y la paz, que son dos conceptos importantes que tenemos que construir, no solamente con los países vecinos sino entre nosotros, cotidianamente”.
“En esto tiene mucho que ver lo que las instituciones hacen día a día, con su trabajo habitual, con su esfuerzo, pero fundamentalmente con la transmisión de valores. Me parece importante y simbólico, y estas cuestiones hay que trasladarlas a la vida cotidiana. Valores como la amistad y la paz, son los ejemplos del camino que hay que continuar para que nos fortalezcamos como comunidad”, finalizó la máxima autoridad de la ciudad.
Posteriormente, se destapó una placa con una leyenda de Simón Bolivar que dice: “La unidad de nuestros pueblos no es simple quimera de hombres, sino inexorable decreto del destino. Unámonos y seremos invencibles”.