El municipio cuenta con un Centro de Mediación Comunitaria y está en pleno funcionamiento.
Este, es un servicio que se ofrece a toda la comunidad, con el objetivo de solucionar inconvenientes que surjan entre las partes o entre vecinos, previo a una instancia judicial.
«Si bien la incorporación de estas mediadoras parece nueva, es un sistema que ya está incorporado desde hace tiempo y que prevé la Ordenanza Nº 744. En este caso, en el ámbito de la Municipalidad, se dio la creación del Centro de Mediación Comunitaria», explicó la directora general de Gobierno, Gisela Mattalía.
«Surgió a raíz de una inquietud de dos abogadas de la ciudad, quienes se han recibido hace poco de mediadoras y quieren hacer sus pasantías acá. Lo realizan de manera gratuita y en un espacio municipal. Está destinado a personas que no pueden pagar una mediación prejudicial obligatoria, que es una instancia previa al inicio de un juicio en varios tipos de litigios», agregó.
Primera mediación
«La municipalidad ofrece el servicio a toda la comunidad para aquellas personas que necesiten hacerla. La primera de ellas fue propuesta por el municipio y tuvo que ver con un conflicto entre vecinos y un local comercial y que generaba una complicación a la hora de una convivencia pacífica. Ya hemos tenido algunas reuniones, pero no se pueden dar detalles, ya que el ámbito de la mediación es reservado, con secreto profesional de las mediadoras y de las partes que intervienen.”, contó al respecto.
Estos acuerdos o resoluciones, según explicó la funcionaria, son voluntarios y puede ser homologado o tiene la misma fuerza que cualquier otra resolución a la que se llegue vía judicial.
La mediación y las cuestiones judiciales
«Aspiramos a que sea una manera de descongestionar la cuestión judicial. Si bien se trata de conflictos que se dan en el ámbito administrativo, entre vecinos o algún tema que no sea de importancia como para iniciar un juicio, es importante que se pueda debatir», continuó.
«Lo bueno también de la mediación es el intercambio de opiniones, un acuerdo entre personas y en la que todas van a poder cumplir”, remarcó y continuó: “En un juicio, el juez impone determinadas resoluciones, que pueden ser aceptadas o no por las partes, pero que tienen que ejecutarse”.
“En la mediación, lo que hacemos es plantear el problema, analizarlo desde la óptica de todas las partes y las soluciones surgen de las mismas personas, con la proyección de que sea ejecutable por las partes», finalizó la Dra. Mattalía.