Los avances en la obra hídrica en los puntos estratégicos de El Trébol para terminar con las inundaciones en la ciudad, son notorios. Basta con salir a la ruta por los accesos que dan al oeste para ver el bordo de contención, esa especie de muralla que linda con el corredor asfáltico, terminado, desde la intersección de la 40S y la 13 hasta el acceso Viena, y percatarse del cambio por módulos de grandes dimensiones en lugar de las pequeñas alcantarillas que había y que impedían el rápido escurrimiento del agua.
Finalmente, el drama histórico de las inundaciones en la ciudad, comienza a llegar a una solución final.
La historia cuenta con al menos una decena de graves inundaciones desde la década del ’20 a la fecha.
«Los avances son enormes en el tema hídrico. Estaba pendiente desde hace muchos años. Es un problema histórico de la ciudad, de décadas y décadas. Tuvimos cero respuestas del Gobierno de Perotti cuando pedimos por la obra, pero ahora fuimos escuchados. A nosotros nos tocó la primera inundación de más de 100 localidades en todo el país con este fenómeno climático, pero esta obra servirá como una solución definitiva”, señaló la intendente Natalia Sanchez.
A través de un esfuerzo mancomunado entre el municipio, Vialidad, Recursos Hídricos y el Comité de Cuencas «Las Turbias», con las incesantes gestiones del senador Esteban Motta, las obras se fueron cristalizando.
«El cambio climático va a seguir y es por eso que tenemos que generar conciencia ambiental. Depende de nosotros. Tras el 13 de diciembre cuando padecimos la inundación, en tres días, todo el gabinete de Pullaro se puso a disposición. En menos de un mes, hicimos el bordo de contención a la vera de la ruta. Ahora se cambiaron todos los módulos para que pase más agua por los canales reemplazando al viejo y pequeño alcantarillado existente y se reparó el acceso de calle Palermo a la ruta que se había levantado», explicó Sanchez.